La Arquidiócesis de Xalapa, a través de su comunicado dominical, afirma que una forma de esclavitud humana actual consiste en ayudar a los pobres, quienes no deben ser usados como medios o instrumentos para mantener el poder.
A continuación, el comunicado:
El gozo del nacimiento, ya próximo de Cristo, marca el tiempo del adviento con el don de la alegría porque él viene a liberar al ser humano de toda explotación o sometimiento. Una forma de esclavitud humana actual consiste en ayudar a los pobres, pero no por caridad verdadera, sino como una forma de control o poder sobre los que reciben los beneficios. Esta forma de esclavitud ha existido siempre en la historia humana. Por eso, es conveniente declarar que los necesitados y pobres no deben ser usados como medios o instrumentos para mantener el poder, pues ellos tienen el derecho de ser promotores de su propio destino y ser integrados al auténtico desarrollo integral.
En contraste, el actuar de Jesús siempre es y será radicalmente diferente para con los pobres y necesitados. Él no hacía alarde de su poder. Cuando los discípulos de Juan el Bautista le preguntaron si él era el Mesías, Jesús no responde con argumentos teológicos ni con otras afirmaciones. De manera sencilla, él señala los signos que lo acompañan: los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos son purificados, los sordos oyen y los muertos resucitan. Ninguna de estas acciones es superficial ni pasajera. Son transformaciones y liberaciones profundas de la vida de los que sufren. Son signos verdaderos de la llegada del Mesías que anuncia el evangelio a los pobres.
Este tiempo de adviento es una gran oportunidad para que todos, ciudadanos y autoridades, permitamos que el Mesías nos libere de usar a los demás y de que otros nos utilicen para fines contrarios a la dignidad de todo ciudadano mexicano y veracruzano.