Fátima “N”, joven presuntamente relacionada con el asesinato del sacerdote Ernesto Baltazar Hernández Vilchis en el Estado de México, declaró durante la audiencia inicial del caso que ella trabajaba como escort y, desde hace un año, tenía encuentros íntimos con el presbítero.
De acuerdo con información publicada por Milenio, la mujer narró que el 29 de octubre se quedó de ver con el ahora occiso en el hotel Bikos, ubicado en la Avenida López Portillo.
La acusada señaló que pasó varias horas en una de las habitación del lugar tomando bebidas embriagantes, pero después se lo llevó a un departamento en la unidad habitacional Morelos, al sur de Tultitlán, para despojarlo de sus pertenencias.
Ya en el departamento, la mujer le dio gotas de Clonazepam al religioso, por lo que él se quedó dormido.
Sin embargo, Hernández Vilchis se despertó y un supuesto cómplice de la mujer, identificado como Brandon N’, habría golpeado en la cabeza al sacerdote con con un bate metálico.
Cabe recordar que Ernesto Baltazar, presbítero de la Diócesis de Cuautitlán, fue reportado como desaparecido el pasado 27 de octubre en la colonia Ampliación La Piedad, en Tultepec.
El cuerpo sin vida del religioso fue hallado 15 días después, luego de que los detenidos habrían señalado el lugar donde arrojaron el cuerpo.
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Fuente: Milenio/Foto: RRSS/
