De manera temporal, aproximadamente 30 restaurantes han cerrado sus puertas por la contingencia que se vive debido al COVID-19 en la ciudad de Boca del Río, lo que al sector le está generando pérdidas económicas importantes.
El presidente de la Asociación de Restauranteros en dicho municipio, Lorenzo Montalvo, reconoció que la situación actualmente se está dando de manera complicada, más que están aguantando a sus empleados a pesar de que no hay trabajo.
Existes otros establecimientos de este giro que están cerrando por muy tarde a las 10 de la noche, debido a las recomendaciones que tienen de parte de las autoridades, pero con mínima presencia de gente.
“A los empleados, no estamos corriendo gente, eso es lo importante, los estamos tratando de mantener hasta donde más se pueda”.
Lamentó que el gobierno federal no esté otorgando incentivos a los empresarios, siendo que en otros países se está considerando ese aspecto para soportar la crisis económica, mientras que en Boca del Río dijo, afortunadamente están siendo respaldados ante cualquier necesidad que surja.
