Una tormenta atípica registrada en la ciudad de Nuevo Laredo, Tamaulipas, provocó la caída de más de cien árboles, torres con cables de alta tensión, semáforos y el cierre parcial de la carretera al Aeropuerto.
El fenómeno meteorológico, registrado el jueves, fue reportado con lluvia y granizo, además de ráfagas de viento de hasta 90 kilómetros por hora, por lo que el suministro de agua, energía eléctrica y de comunicación fueron afectados al poniente de la ciudad.
La Dirección de Protección Civil y Bomberos reportaron a temprana hora que fueron sorprendidos por la lluvia, granizo y los fuertes vientos, ocasionando que alrededor de 100 árboles ubicados en diferentes puntos fueran arrancados, algunos de ellos cayeron en vehículos particulares que se encontraban estacionados.
En redes sociales se observó que el viento levantó un tinaco y lo dejó colgado en unos cables de energía eléctrica.
Anuncios publicitarios, nomenclaturas y láminas galvanizadas se hallaban desatoradas y otras derribadas en el piso.
Fuente:Excélsior/Foto:Twitter/JAC
