En el marco del primer debate por la presidencia de los Estados Unidos, el actual presidente, Donald Trump, defendió su nominación de Amy Coney Barrett a la Corte Suprema, tras muerte de Ruth Bader Ginsburg.
El republicano argumentó elegir a la juez, es su derecho al haber ganado las elecciones y afirmó que los demócratas hubieran hecho lo mismo y hasta más rápido.
En tanto, Joe Biden sostuvo su postura de mantener hasta después de febrero la elección de juez de la Corte Suprema.
"Es la única manera de que el pueblo estadounidense manifieste su punto de vista", manifestó el demócrata.
