Autoridades afganas reportaron varias víctimas en explosiones registradas en colegios electorales en todo Afganistán, luego de una advertencia de los talibanes de que boicotearían las elecciones legislativas de este sábado.
Decenas de personas resultaron heridas este sábado en Kabul (capital de Afganistán) producto de una serie de explosiones ocurridas durante la celebración de los comicios parlamentarios, informaron medios locales.
El jefe de la policía local confirmó que tres explosiones se produjeron cerca de los colegios electorales, aunque ningún grupo armado que opera en el país se ha atribuido las detonaciones.
"Lo ocurrido no influyó en la intención de los ciudadanos de votar", enfatizó el funcionario afgano.
Los problemas técnicos hicieron que muchos de los cinco mil 100 centros de votación instalados en todo el país permanecieran cerrados todo el día, dejando a los votantes frustrados.
Las explosiones también se produjeron pese a que alrededor de 70 mil fuerzas de seguridad se desplegaron para proteger los centros de votación en todo el país devastado por un conflicto armado que en los últimos años se ha recrudecido.
Los talibanes y el Estado Islámico anunciaron que llevarían a cabo ataques en el día de las elecciones, después de haber reivindicado muchos otros atentados durante la campaña electoral que causaron ya la muerte de 10 candidatos y decenas de civiles.
Las urnas se abrieron en la mayoría de las regiones de Afganistán a las 07:00 horas locales (02:30 GMT) y se cerrarán a las 16:00 horas, con casi nueve millones de personas elegibles para votar en cinco mil 100 centros de votación en medio de medidas de seguridad en todo el país.
Alrededor de dos mil 450 candidatos compiten por lugares en el parlamento de 250 escaños, según la Comisión Electoral Independiente (IEC).
Naciones Unidas, que han estado apoyando el proceso, instó a los afganos a "aprovechar esta oportunidad para ejercer su derecho constitucional al voto" y pidió que las elecciones se celebren en un entorno seguro y protegido.
Previstas inicialmente para el verano de 2015 pero retrasadas a causa de la precaria situación de seguridad, la inestabilidad política y los problemas financieros, las elecciones son vistas como una prueba para la frágil democracia afgana y como una encuesta antes de los comicios presidenciales de 2019.
Por primera vez desde el final de la misión militar de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en 2014, el gobierno afgano es responsable de las seguridad durante las elecciones.
Las elecciones son también consideradas una etapa fundamental antes de una cumbre de la ONU programada para el próximo mes en que Kabul tendrá que demostrar sus avances en el “proceso democrático”.
Entre los dos mil 500 candidatos compitiendo por las legislativas afganas, 16 por ciento son mujeres. Una cifra excepcional que, sin embargo, encubre el difícil recorrido de las mujeres candidatas e incluso de las elegidas.
Fuente:Notimex/Foto:Notimex/JAC
