Opinión

Mujeres de Agua

Por Ivonne Moreno


Exposición de Georgina Malpica y Paulina Lagos en Corredor Curarte del Hospital Español

El agua es un recurso recurrente en el terreno plástico. La pintura por centurias se ha nutrido de los piélagos y de las aguas dulces para emular su color, plasmar su ira, tranquilidad o la vitalidad de su carácter de elemento fundamental.

Por otro lado la mitología y las religiones van connotando al agua y por ende a las criaturas asociadas con él, como las sirenas.

El reconocido antropólogo Félix Báez Jorge nos da, en su libro “Las Voces del Agua”, una taxonomía de estos seres mitológicos muy certeros en cuanto a su aparición en la historia de la cultura universal:

En el plano Físico; la sirena es cuerpo psciforme, aviforme, joven seductora, anciana repulsiva vinculada a las aguas dulces está relacionada con la luna y la noche y en espiritual demoníaca, lasciva, letal, vidente, fundadora de pueblos, protectora, imagen del pecado, modelo étnico y expresión de arrepentimiento.

Y abrazándonos de la sirena como símbolo de ubiquidad cotidiana seguimos las pistas de Báez Jorge para adentrarnos en la propuesta de Georgina Malpica y Paulina Lagos.

Óleo, Cerámica y fotografía atada al agua, al misterio a las sirenas son los enunciados plásticos de dos realizadoras encantadas con el agua y sus consecuencias femeninas.

Georgina Malpica subyugada por el trabajo de la arcilla y el fuego se asoma al múltiple significado de las hechiceras de navegantes y hombres atados al mar.

Fabulando con materiales concretos Georgina logra emular los azules de la primicia de Homero, en la aventura de Odiseo con estos seres de canto mortal. Georgina sigue el curso del agua no como purificador o elemento de embeleso sino como dador de existencia, amuleto de catarsis e identificador de sensibilizador de la mujer. El cuerpo desnudo y el agua, el placer y el vital líquido fundidos en la mira de la búsqueda de lo trascedente, de lo etéreo.

Paulina Lagos se contacta al contexto de lo visual por medio de la fotografía, muy joven experimenta con imágenes a medida de piel de otras jóvenes y el agua es el vínculo para unir una apología entre el sexo femenino y sus bondades.

Abrazadas a los mitos, el placer de la sal y lo dulce sobre la anatomía y poderes de la mirada y extremidades de la mujer son los puntos de la exposición Mujeres de Agua

La misma, asienta a Georgina Malpica como una realizadora plástica en camino a convertir al esencial elemento en parte se lenguaje visual y a la novel fotógrafa Paulina Lagos a descubrir el

Sentido del noble líquido, como dimensión de perpetuidad.

“Mujeres de Agua”, sendero intangible como muestra plástica en ruta para saciar la sed de generaciones humanas, ávida de lo mágico como permanencia en la Tierra.