Opinión

Tres preguntas sencillas para encontrar tú mejor yo

Por Roberto Matosas


¿Quién eres tú? Es una pregunta fácil, ¿verdad?

 

Por supuesto que saben quiénes son. Ya sabes lo que haces, ya sabes cómo vives, sabes con qué personas estás conectado.

 

Pero, ¿es realmente lo que eres?

 

Creo que tu yo auténtico es algo más profundo, algo más personal. Es el lugar en el que encontrar respuestas a preguntas como: ¿qué es lo que realmente importa? ¿Lo que rompe el corazón? ¿Lo que abre los ojos? ¿Lo que se acelera tu corazón? ¿Cuando estás en tu elemento? ¿Qué te enciende? Lo que haces, ¿verdad? Y ¿cómo llevar ese verdadero ser en tu vida diaria?

 

Tener una casa llena de niños, mis días se componen de seis millones de pequeñas tareas que todos necesitamos hacer en este momento. Algunos días acabo de hacer la siguiente cosa y el siguiente sin tener que pensar en cómo quiero estar presente en el hacer. Yo no aparezco como yo, sólo me muestro como una mamá-persona genérica. Ella es útil, pero no es realmente ella. (El yo real es menos productivo, pero más divertido.)

 

Amy Cuddy, autor de la presencia e investigadora detrás de una charla en TED sobre el uso de lenguaje corporal para dar forma a su vida, escribe que "el deseo de sentir y ser visto como" auténtico" parece ser una necesidad humana básica", y que

 

"si nuestras acciones no son consistentes con nuestros valores, no vamos a sentir que estamos siendo fieles a nosotros mismos".

 

Pero es extrañamente fácil perder el contacto con lo que es el verdadero yo.

 

Por un lado, lo que eres cambia en el tiempo. La experiencia nos cambia. (Esto no tiene por qué significar que te has perdido a ti mismo. Esto podría significar que eres cada vez más tú.) Por otro lado, todos estamos distraídos. Pasamos tanto tiempo comparando, actualizando y descargando que no hay margen para pensar en lo que somos y lo que creemos.

 

Si no estoy prestando atención, termino con la máscara de la persona que solía ser (¡es tan cómodo!) O la persona que yo creo que se supone que sea (¡es tan aceptable!) O la persona que hace todas las cosas (¡es tan eficiente!) en lugar de lo que realmente soy hoy.

 

Pero cuando tomo decisiones desde un lugar del conocimiento y de ser yo mismo, todos los detalles se consiguen más simples. Veo más claramente cómo gastar mi tiempo y de pasarlo con - y qué dejar de hacer por completo. Yo sé las pertenencias de dejar de lado porque son parte de mi pasado, no es mi futuro. Yo sé cuándo decir que sí y cuándo decir no.

 

Amy Cuddy escribe que este es el camino hacia expresar cómodamente tus verdaderos pensamientos, sentimientos, valores y potencial. Cuando se sabe quién eres, realmente puedes presentarte en tu vida. Puedes relajarte en ser el más audaz, más pisando la tierra. (Hola, objetivos de la vida.)

 

Para cultivar ese tipo de presencia, se sugiere hacer preguntas para sacar lo mejor de uno mismo. Pruebe estas opciones:

 

1. ¿Cuáles son tus fortalezas características?

Algunas cosas son fáciles para ti, pero no para todo el mundo. Sabes más acerca de algunas cosas, te preocupas más por algunas cosas, y simplemente somos buenos en algunas cosas de una manera que no todo el mundo lo es. Tus puntos fuertes, tus dones y tus pasiones pueden apuntar hacia todo lo mejor de ti.

 

2. ¿Qué es lo único de ti mismo que te lleva a tus momentos más felices o a tus mejores actuaciones?

Sin embargo, defines el éxito - en el trabajo, en las relaciones, en la creatividad - ¿Qué acerca de ti mismo te lleva a ese lugar? Tal vez sea tu perseverancia, tu compasión, tu valentía, o tu optimismo. Tal vez sea tu capacidad de escuchar, tu voluntad de tomar riesgos, o tu apertura al cambio. ¿Y te ayudas a hacerlo bien y a estar bien?

 

3. ¿Cuándo has actuado de una manera que sentías natural o correcta?

Tal vez te sientes más tú cuando estás para ayudar o servir. Tal vez te siente más vivo en la comunidad. Tal vez te sientes como si estuvieras en tu estado natural cuando estás creando algo. También el mejor yo es parte de lo que eres.

 

Es una pregunta simple, pero nada fácil. ¿Quién eres en realidad? ¿Quién eres tú?

 

 

(Fuente: Melissa Camara Wilkins 4.IV. 2016)