El contacto con el barro produce una sensación muy grata.
La piel pareciera fundirse en un roce placentero donde alargar la materia fresca y moldeable causa placer. Los ceramistas tienen facultad de trabajar con este derivado de la tierra y hacer con ella, el torno y el fuego piezas multiformes de distintos usos.
México es un país de tradición cerámica, las culturas prehispánicas en casi toda la extensión del territorio, trabajaron vasijas, algunas con uso funerario, de carácter ritual y otros cotidianos´. Traemos a la memoria a los totonas, mixtecos,mayas y aztecas por citar algunas de las bellas propuestas en este rubro. Del mismo modo lo encontraremos en el desarrollo de la creatividad humana en el mundo como en Grecia, Medio y Lejano Oriente a manera de citar a la cerámica en su decurso.
La cerámica ha pasado a ser una de las disciplinas estéticas más propiciadas en el campo de las artes visuales. México desde hace algunas décadas destaca por Bienales y por tener ceramistas muy prestigiados. Aquí mismo en el Estado de Veracruz, hay ceramistas de gran prestigio: Gustavo Pérez, Mariana Velázquez, Martha Ovalle, Mayte Rodríguez, Magali Goris entre otros.
En el Puerto, bajo la dirección de Joel Bautista Rojo, un grupo de realizadores entusiastas se han agrupado en Cerámica Rojo, logrando destacar no solo el carácter ornamentario de los productos de la alta y baja temperatura sino utilitario y un escenario más para mostrarlo fue el Centro Estatal de Transfusión Sanguinea donde su directora Elidé Bravo Sarmiento ha procurado a guisa de título fotográfico de Enrique Favela intervenir un espacio.
Doble mérito unir el quehacer plástico y para exhibirlos en centros laborales, de este modo visitantes y residentes tienen la oportunidad de estar en contacto con el arte.
La temática en el CETS es la promover la donación de sangre y bajo este sintagma los creadores articulan enunciados con color, textura y composición aliados al cuerpo humano y el aparato circulatorio.
En esta ocasión los talentos de Georgina Malpica Ortiz, Eloísa Remes, Valeria Beirana Samiento, Arlete Yunes, Karla Maroño, Tere Pérez M orales, Rocío Murcio Francine e Ives Delange unieron su obra a una causa noble.
En el CETS también podrán disfrutar del Taller de Niños Zeurrupa, alumnos entre 3 y10 años: Miranda Lara, Santiago López, Alan Lezama, Romina Zaldívar, Mathías y Ana Sofía Padrón, Mónica Alejandra Pineda, Mateo Criollo, Daniela Carrión, Ana Sofía Arteaga, Valentina Belda y Gabriela Neervoort quienes plasmaron su idea de apoyar al otro cuando lo necesita.
Conminamos esta tarea y exhortamos a intervenir espacios con arte y más arte para motivar el poder creativo de la alteridad.
