Opinión

¿Somos felices?

Por Ramón de la Peña


Me llamó mucho la atención un mensaje de Gabriela Cuevas publicado en El Universal el 4 de agosto, en el que cuestiona si realmente somos felices los mexicanos en nuestro país. Destaca que en el reporte de "Happy Planet Index 2016" nuestro país es el segundo país en donde sus habitantes dicen que son muy felices. En su mensaje destaca que "Por supuesto que también existen datos con una perspectiva más optimista pero tengo serias dudas de que sean suficientemente contundentes para llevarnos al nivel de felicidad que significará estar en el segundo a nivel mundial"

Qué factores destaca en su mensaje que la hace dudar del resultado de la felicidad que impera en nuestro país: "En términos de desigualdad, nuestro país ocupa el primer lugar entre los países de la OCDE; La esperanza de vida al nacer ... nos ubica en la posición 65, que es similar a las de Uruguay; En las mediciones sobre obesidad entre países de la OCDE ... solo somos superados por Estados Unidos; Los niveles de corrupción nos sitúan en el lugar 79; en cuestiones de inseguridad estamos situados en la posición 144 de 162 ... Siria ocupa el lugar 162; La capacidad de reacción policiaca ... nos coloca en el grupo de los cinco países con el peor desempeño, En materia económica, estamos en el lugar 57 de 140 países"

Ante esta serie de indicadores  repito la conclusión del mensaje: 

"tengo serias dudas de que sean suficientemente contundentes para llevarnos al nivel de felicidad que significará estar en el segundo a nivel mundial"

Esta conclusión trajo a mi mente dos mensajes, dos ideas. La primera de una charla que tuve con una ex alumna que estaba llevando a cabo un proyecto de tesis en la Universidad de Texas en El Paso, Recuerdo uno de los temas que trató relacionado con las diferencias que ella había visto entre los estadounidense de ascendencia latina y los estadounidenses de ascendencia sajona, el tema estaba relacionado con la pregunta: ¿Que hace infeliz a cada uno de estos grupos de ciudadanos estadounidenses?, y la respuesta que ella encontró fue la siguiente: Lo que más causa dolor a los estadounidenses de ascendencia sajona es perder el empleo, mientras que para los de ascendencia latina es la muerte de un familiar cercano, perder  un hijo o un nieto es el mayor dolor.

Como ve estimado lector la pregunta esencial es ¿que hace feliz o infeliz a un mexicano? inmediatamente recordé el mensaje esencial de la investigación que llevo a cabo la Universidad de Harvard por 75 años para encontrar la respuesta a la siguiente pregunta: ¿Que nos mantiene sanos y felices conforme avanzamos en la vida?, le recuerdo la respuesta que Robert Waldinger, el encargado actual de este proyecto nos dice al respecto: "la respuesta no tiene que ver con riqueza, fama, ni el tener que trabajar mucho. El mensaje más claro de estos 75 años de estudiar este tema es el siguiente: "Las buenas relaciones nos hacen más felices y saludables, punto."

Pero además en el estudio destaca tres conclusiones importantes: "la primera es que las conexiones sociales nos hacen mucho bien y que la soledad mata. Resulta que las personas con más vínculos sociales, con su familia, sus amigos y su comunidad son más felices, más sanos y viven más que las personas que tienen menos vínculos, pues la soledad es toxica  y conduce a las personas a ser menos felices, ser más susceptibles a recaídas de salud en la mediana edad, sus funciones cerebrales decaen fuertemente y viven menos que las personas que no están solas"

La segunda lección nos dice Robert, "es la calidad de las relaciones con las personas más cercanas. Resulta que vivir en medio de conflictos es muy malo para la salud, quizás peor que el divorcio. Pero vivir en medio de relaciones buenas y cálidas da una gran protección"

En la tercera lección se nos dice, "Que las buenas relaciones no solo proteger el cuerpo, protegen también el cerebro" pues una persona sin buenas relaciones pierden antes la memoria... las personas de 75 años más felices al jubilarse fueron los que activamente reemplazaron compañeros de trabajo por compañeros de juego"

Como ve estimado lector el factor clave para que los mexicanos seamos el segundo país más feliz en el mundo es debido a la calidad de las relaciones que tenemos con nuestra pareja, nuestros hijos, nietos y amigos. Claro que si lográramos eliminar las características que se mencionan en el mensaje de Gabriela Cuevas, seríamos un país en el cual la gente se sentiría mucho más feliz y sin duda le ganaríamos al país más feliz en el mundo: Costa Rica.

Efectivamente la relación armónica con la familia, los amigos y nuestra comunidad es esencial.