Opinión

El triangulo perverso

Por Ramón de la Peña


Los tres factores que más han impactado negativamente en nuestra comunidad son: La impunidad, que nos ha conducido a la corrupción, ambas nos han llevado a tener una gran desconfianza. Lo que ha generado que tengamos dudas de todo: ¿Será cierto que vive donde dice vivir; Se llamará como dice que se llama; Tendrá los estudios que dice tener?. Por lo cual se han creado una serie de leyes, reglamentos y requisitos para verificar si lo que estamos diciendo es cierto.  

Por lo que deberíamos de tener en cuenta reglamentos, como el Reglamento a la Ley de Protección al Ciudadano del Exceso de Requisitos y Trámites Administrativos, propuesto en Costa Rica  ... El reglamento está en el siguiente sitio de Internet: www.tramitesconstruccion.go.cr/docs/32565.pdf

¿Pero qué conceptos, mensajes y normas me gustaría que sean parte del reglamento que deberíamos de tener en Nuevo León y en México?

Ante todo el Artículo 4º que nos dice: "Los trámites administrativos deben estructurarse de manera tal que sean claros, sencillos, ágiles, racionales, y de fácil entendimiento para los particulares, a fin de mejorar las relaciones de estos con la Administración Pública, haciendo eficaz y eficiente su actividad"

Pero también se debería de incorporar lo que nos menciona el Artículo 5º relacionado con la Eliminación de requisitos: "Mediante el establecimiento de reglas claras y sencillas de fácil cumplimiento por el ciudadano, que permitan la eliminación excesiva de documentación y requisitos; los órganos y entidades públicas sujetos a la aplicación de este reglamento, eliminarán los requisitos que no tengan un fundamento legal y técnico.

Complementado con el Artículo 6º: "Cada oficina perteneciente a un órgano de la Administración, deberá coordinar internamente, a fin de evitar que el administrado (El ciudadano) tenga que acudir a más de una oficina para la solicitud de un trámite o requisito.

Ellos incluyeron en el Artículo 7º los derechos que deberíamos de tener los ciudadanos en nuestras relaciones con la Administración Pública,  ellos destacan  los siguientes:

" a) Conocer en cualquier momento el estado de la tramitación de las gestiones o peticiones; b) Identificar a las autoridades y al personal de las entidades u órganos públicos que tramitan su petición; c) Negarse a presentar documentos no exigidos por disposición normativa, o que ya se encuentre en poder de la administración actuante, sea que refieren a un mismo trámite o para otros dentro de la misma entidad. Las diferentes entidades u órganos de la Administración Pública que por ley, están encargados de conocer sobre un trámite o requisito cuyo fin es común, complementario o idéntico, deberán llegar a un acuerdo para establecer un trámite único o compartido, delimitando claramente las competencias institucionales cuando éstas no estén definidas en el resto del ordenamiento; d) Tener acceso a los requisitos necesarios para la realización del trámite por medios escritos y digitales; e) Obtener orientación e información acerca de los requisitos normativos o técnicos que las disposiciones vigentes impongan a las actuaciones o gestiones.; f) Exigir las responsabilidades de las entidades u órganos públicos y del personal a su servicio, cuando legalmente corresponda de conformidad con el ordenamiento jurídico vigente; g) Ejercitar su derecho de petición de forma ágil y sin limitaciones"

Pero nuevamente vuelvo a comentar que todo este exceso de trámites, documentos y demás requisitos que se tiene en el gobierno para cualquier trámite que se quiera llevar a cabo, nacieron por la gran desconfianza que se ha generado al paso del tiempo. Yo recuerdo en los años de 1950-1960 muchos de los convenios se hacían a la palabra, porque había confianza, ahora ni con contratos firmados ante un notario público se respetan los acuerdos. Pero todo creció debido a la impunidad, misma que tenemos que eliminar: Tiene que haber consecuencias ante los malos comportamientos.