Opinión

¿Es justo?

Por Ramón de la Peña


¿Es justo que los que ganan más, paguen más impuestos?, es la pregunta que se hace en un mensaje de propaganda del gobierno federal, y la respuesta de quien hace la pregunta es que si, que si es justo que paguen más.
Lo que no me queda claro es si con este mensaje se está apoyando y promoviendo que los que más ganan paguen más en porcentaje de los que ganan menos, porque eso es lo que ha estado pasando desde tiempos inmemoriales.
Pues quien gana el salario mínimo paga un cero por ciento de impuesto sobre la renta, pero quien gana 100,000 pesos al mes paga 32% de impuesto sobre la renta. 32,000 pesos mensuales versus cero de un salario mínimo. Como ve estimado lector quien más gana siempre ha pagado más impuestos. Y no solo de impuesto sobre la renta, pues como gana más compra más, tiene una casa más grande, tiene automóviles que consumen gasolina y por lo tanto paga más IVA en todo, o casi en todo, mas el impuesto predial de su casa.
Por lo tanto para mí el gobierno federal debería de buscar la manera de que más personas ganen más dinero del que ganan, más que incrementar el o los impuestos a los que ganan más, así recibiría mucho más recursos que los que actualmente recibe.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) presenta estadísticas que resaltan el camino que debemos de seguir, les recomiendo vean el siguiente sitio en Internet:
 
En el año 2011 se tenía una población total de 112,336,538 mexicanos, de los cuales la población económicamente activa éramos 48,919,800 mexicanos. De esta población económicamente activa el 12.8% gana a lo más un salario mínimo, el 22.6% gana entre uno y dos salarios mínimos, 38.5% gana entre 2 y 5 salarios mínimos y solo el 8.4% gana más de 5 salarios mínimos.
¿La nueva política fiscal se debe de enfocar en ese 8.4% de los mexicanos que más ganan para incrementarles el impuesto que deben de pagar?
Mi respuesta es no, no lo debe de hacer, ¿Entonces que debe de hacer el gobierno, que reformas debe de promover?. Mi recomendación es que la estrategia básica a seguir debería de ser la de ganar-ganar.
Entre más educada sea una persona, las estadísticas nos dicen que va a ganar más dinero con su empresa o en su trabajo en alguna organización. Entonces enfocarse en un esquema educativo de calidad, útil para la vida y el trabajo de quienes participan en esos procesos educativos es un excelente esquema de ganar-ganar.
Para mí es muy importante incorporar módulos de capacitación para el trabajo en los programas de secundaria, bachillerato y profesional, pues un gran número de mexicanos abandona la escuela durante esas etapas educativas. Me encantaría que en cualquier etapa en la que nuestros jóvenes salgan del sistema educativo puedan decir: yo sé y estoy certificado como soldador, o para manejar un torno, o para usar una computadora, o para implantar sistemas de calidad, o para diseñar plantas químicas, o para inventar procesos químicos. Cuidando desde luego, adecuar estas competencias laborales en primer lugar a las necesidades de la comunidad o la región y en segundo lugar a las habilidades y talentos de cada estudiante.
Pero también necesitamos aumentar la productividad en las empresas, pero con el compromiso de que ese aumento se refleje en un aumento significativo en los salarios de los trabajadores, los cuales se han colapsado al paso del tiempo (El salario mínimo en 1970 era de 6,000 pesos del 2012, mientras que el salario mínimo actual es de 1,800 pesos del 2012, menos de una tercera parte del salario de 1970) ; necesitamos que los reglamentos gubernamentales sean promotores y no inhibidores de la creación de nuevas empresas; necesitamos que los papás nos comprometamos a sólo tener los hijos que podemos cuidar, mantener y educar; sin olvidar el ofrecerles una educación de calidad, útil para la vida y el trabajo.