Opinión

Branding Personal

Por Ana Mora


Con toda la fuerza de las redes sociales, una parte integral del plan de marketing, debe ser el posicionamiento, no sólo de la marca que se comercializa, el producto en cuestión o la empresa que lo hace, sino de las personas atrás de ésta.

A los consumidores nos gusta conocer la historia de las empresas, su trayectoria, experiencia y al final de cuentas, toda empresa fue creada por una o más personas, por lo que también nos causa curiosidad quiénes crearon los grandes imperios que conocemos.

La gente jala gente, por lo que se está volviendo importante tener al menos una cara conocida que respalde a la compañía.

No se necesita un gran presupuesto para comenzar a posicionar una persona, sólo comenzar a trabajar en un plan para hacerlo. Cada que publicamos un artículo, damos un discurso, cerramos una venta, subimos una foto, hacemos un video o live, estamos dándonos a conocer a nosotros mismos, por lo que hay que cuidar ciertos detallitos importantes (nos consideremos o no figura pública):

Lenguaje corporal: aspectos como nuestras actitudes, gestos, expresiones, voz, lenguaje, son de mayor importancia que incluso lo que decimos. Hay que cuidarlo y adaptarlos acorde a nuestro negocio. No es lo mismo ser la cabeza de una empresa de tecnología que suelen tener más jovialidad y flexibilidad, que ser un Médico, Contador o Abogado que deberían demostrar mayor seriedad, conocimiento y confianza.

Biografía, historia y trayectoria: para ser un líder de opinión, hay que saber sobre lo que se está opinando. Como dicen, más rápido cae un hablador que un cojo. La experiencia y conocimiento nos darán el respaldo que necesitamos para que la gente empiece a confiar en nuestras palabras.

Imagen física y virtual: a menos que seamos comediantes, hay que transmitir una imagen de profesionalismo que dé sentido al mensaje y trayectoria de acuerdo a lo que hacemos junto con el sector en el que estamos sin olvidar dejar brillar nuestra personalidad.

Presencia en medios: podemos ser grandes eruditos en nuestro campo, pero si no desarrollamos una estrategia de medios, de nada servirá que nos conozcan sólo en nuestra casa. Es importante escoger los medios de acuerdo a la audiencia meta. Si buscamos audiencias jóvenes, por supuesto, las redes sociales deben ser punto medular de la estrategia de medios. Si la audiencia es de mayor edad, un blog, web, entrevistas en canales locales y notas en periódicos, deben estar a la orden del día.

Creatividad: no hay una sola fórmula para triunfar hoy en día, lo que le sirve a una persona o una empresa, no necesariamente puede replicarse y tener los mismos resultados para otra. Nuestra visión del mundo no es probablemente única, ¡compartámosla! Veremos quiénes se identifican con ella.

Recordemos que hoy en día el paradigma en los negocios es hacer tratos persona a persona (no business to business, como antes se consideraba). Hay que darnos a conocer de manera personal para darle mayor respaldo a nuestros proyectos.