Opinión

Los antiguos panteones de Veracruz

Por Ricardo Cañas


ANTECEDENTES
La palabra cementerio viene del término griego koimetérion, que significa dormitorio ya que según la creencia cristiana, en el cementerio, los cuerpos dormían hasta el Día de la resurrección. A los cementerios católicos se les llama también camposantos, dado que en Pisa, cuando ateniéndose a medidas de higiene la autoridad ordenó cerrar el cementerio, que había sido construido en el siglo XIII dentro de la ciudad, el terreno fue cubierto con una gran capa de tierra, que las galeras pisanas habían traído de los lugares santos de Jerusalén.
La insalubridad que tenía el lugar dónde hoy se asienta Veracruz daba por resultado una alta mortalidad entre sus habitantes y viajeros de paso, por tal motivo en el siglo XVII a Veracruz le apodaban "Cementerio  de Europeos", la ciudad durante todo el siglo XVII y la mayoría del XVIII en plena era colonial era considerada como una ciudad de paso muy pocos se quedaban a habitarle solo los comerciantes con muchos intereses económicos y por supuesto sus esclavos, desembarcaban los viajeros aquí e inmediatamente emprendían el camino al altiplano o viceversa.
LOS PRIMEROS CAMPOSANTOS DENTRO DE LA CIUDAD
Hubo camposantos desde el cuarto asentamiento de la ciudad de Veracruz ocurrido en los primeros años del siglo XVII, siguiendo lo dictado en los croquis de la antigua "Ciudad de Tablas" muestra que había un panteón en la parte posterior de la Catedral, es decir, donde hoy está la Fototeca de Veracruz. Así mismo se realizaban entierros dentro del hospital de San Juan de Montes Claros el cual estaba situado en la hoy calle de Lerdo entre Independencia y 5 de Mayo donde actualmente se encuentra un estacionamiento; también hemos encontrado que se sepultaban cadáveres en los conventos, patios de las casas y dentro de las iglesias.
EL CAMPOSANTO DE SAN JUAN DE ULÚA
Casi desde su fundación en el islote de San Juan de Ulúa existió un camposanto, en ese lugar eran sepultados soldados, castellanos y otros habitantes de la isla-fortaleza, este   cementerio estaba localizado en la parte posterior de la fortaleza, en el lado de la isla que mira hacia mar abierto, fue abandonado en la década de los años 20’s del siglo XX actualmente en ese lugar se encuentra parte del Arsenal Nacional.
En España, la orden de construirse los cementerios fuera del poblado para quitar la costumbre insalubre de enterrar en las iglesias de España data del año 1773 como se demuestra en la Ley 1ª, tít. iii, lib. i de ley Novísima.2 Carlos III mandó restablecer (1787) la disciplina de la Iglesia en el uso y la construcción de los cementerios según lo dispuesto en el Ritual romano y en la ley 11, título 13, Partida 1.a, mandando además que se fuesen gradualmente estableciendo los cementerios rurales y que se aplicase en lo posible el bien meditado reglamento del cementerio del Real Sitio de San Ildefonso, de fecha 9 de febrero de 1785. Por el capítulo 2.° de las reales ordenanzas de 15 de noviembre de 1796 respectivas a la policía de la salud pública, se dispuso también que, mientras llegaba el feliz momento de quedar erigidos los cementerios rurales, se sepultasen los cadáveres con la profundidad competente, que no se expusiesen en parajes públicos los que hubiesen llegado a términos de una decidida y completa putrefacción y que las mondas se hiciesen en las horas, estaciones y estado de la atmósfera menos expuestos a propagar los miasmas que despiden los cadáveres y sus despojos. Carlos IV, en 1804, dictó varias medidas para activar la construcción de los cementerios extramuros.
EL PRIMER CAMPOSANTO A EXTRAMUROS: LA HUACA
Debido a la terrible insalubridad en la que se vivía en la ciudad de Veracruz, en 1790 por orden del Virrey Juan Vicente de Güemes Pacheco de Padilla Horcasitas y Aguayo, Conde de Revillagigedo prohibió las inhumaciones dentro de la ciudad y ordena que se construya el primer panteón a extramuros, y del lado sur de la misma, junto a la iglesia del Santo Cristo de el Buen Viaje   (en parte de lo que hoy es el barrio de la Huaca) y porque hacia el sur? porque casi siempre los   vientos viene del norte, si el panteón se hubiera construido en ese lado los vientos llevarían los "malos aires" de la putrefacción hacia la ciudad, del modo contrario los alejan. Este panteón fue administrado por el clero y tuvo un costo de $8,888 pesos pagado por la mitra de Puebla y por los habitantes de Veracruz y estuvo en funciones hasta 1833, aunque para 1855 todavía existía pero abandonado, poco apoco la maleza fue cubriendo estas viejas tumbas que quedaron en el olvido y con el paso de los años se asentó sobre las mismas el famoso barrio de la Huaca; este nombre de origen Quechúa significa “lugar sagrado”, y fue dado por los viajeros extranjeros que llegaban hasta la Iglesia del Cristo para rogarle que llegaran con bien a su destino, al salir de la misma veían el panteón situado a su costado exclamando en su lengua “Huaca” refiriéndose al camposanto.
EL SEGUNDO PANTEÓN DE VERACRUZ
En 1831 fue proyectado hacer un nuevo panteón todavía más al sur pues para éstas fechas los barrios extramurales de “la Huaca”, “el mondonguero” ya habían rodeado el viejo camposanto. Este nuevo panteón fue terminado en 1833 y tuvo un costo de $60,617.00 pesos pagados por el supremo gobierno y los recursos económicos provinieron de un impuesto que se le aplicó a las mercancías de importación conocido como "Derecho de Ornato" este panteón estaba en el espacio donde hoy está el Parque Ecológico y parte del Hospital General, se le conoció como el panteón "Del Canelo" y estaba totalmente bardeado, dividido en cuatro secciones con cuatro calzadas de mármol genovés, en cada una de las esquinas tenía una columna de casi ocho metros de altura, un pórtico muy elegante con pilastras y frontispicio de orden dórico, que en la parte superior tenía un enorme letrero con el mensaje siguiente: “Postraos…Aquí la Eternidad empieza…. Y es Polvo Aquí, la Mundanal Grandeza” este pensamiento esta atribuido a Don Manuel Díaz Mirón. En la parte central de todo el terreno se levantaba una capilla con una hermosa cúpula de forma elíptica, rodeada de una balaustrada muy elegante y en las paredes posteriores   había nichos para colocar las osamentas, este panteón existió por casi cien años hasta que en 1932 se cerró para construir en su lugar el famoso Parque Deportivo Veracruzano el cual fue demolido al inicio de la década de los 90´s.
EL PANTEON PARTICULAR VERACRUZANO
El 17 de septiembre de 1894 el Notario Público Lic. Leandro Alcolea levantó la escritura para la conformación de una Sociedad Anónima que conformarían un nuevo cementerio,   denominado "Panteón Particular Veracruzano" en los terrenos de la ex hacienda de Malibrán, los primeros   socios fueron Don José González Pagés, Antonio Revueltas, José Mirón y Mosquera, entre otros. El terreno fue comprado al señor Ramón de la Fuente,   comerciante español radicado en esta ciudad y aquí viene lo más curioso del caso: éste caballero estaba incrédulo de la construcción del cementerio y exclamó cuando hizo la venta de sus terrenos "quien ch...aos va a venir a enterrar a alguien hasta acá" pues   para esa época se consideraba muy lejos esa zona, sin pensar que él sería el primer cadáver que sepultaron en ese panteón el día 31 de enero de 1896 ocupando la fosa #1, este panteón todavía existe, considerado como monumento histórico debido a la hermosura de muchas de sus tumbas de mármol, entre ellas de grandes personajes de la historia de México como Manuel Díaz Mirón, Manuel Gutiérrez Zamora, Francisco Hernández y Hdez., la hermosa tumba azulejo de Talavera de don Alejandro Sánchez, gran benefactor de la ciudad de Veracruz, la cual fue diseñada por él mismo muchos años antes de morir; así mismo se encuentra la tumba de Domingo Bureau en el área que corresponde a los Bomberos de Veracruz del cual fue fundador en 1873. También   está la tumba de Esteban Morales, de las víctimas del buque “Grijalva” entre otros más. Casi desde el inicio de su existencia los socios de este panteón optaron por construir un ramal para el tranvía de mulitas para poder dar un buen servicio  de transporte a los deudos, este servicio dejó de tener tracción animal y se volvió eléctrico en 1939 con la inauguración de la ruta de tranvías “Panteones” que en 1957 se une en forma de circuito a la nueva ruta “Reforma-Zaragoza” que desapareció en forma definitiva en 1981.
EL PANTEÓN GENERAL
Debido a que el Panteón Particular Veracruzano por ser privado cobraba por las inhumaciones y no toda la población podía pagar sus costos,   el Ayuntamiento de Veracruz poco tiempo después creó el “Panteón General” que estaba ubicado frente al particular donde hoy es el parque Reino Mágico, administrado directamente por el gobierno municipal, estaba sobre un médano lleno de monte pues poco mantenimiento se le daba, solo en épocas de los "Fieles Difuntos" se chapeaba, no estaba del todo bardeado y por las noches eso mismo volvía peligrosa la zona, originalmente llegaba sus terrenos hasta el hoy fraccionamiento “Moderno” ya que en esa parte se encontraba la Zona Infantil, es decir donde se sepultaban a los niños, por ser de índole municipal, las fosas no podían ser de propiedad, ni tenían perpetuidad, después de siete años de permanecer el cadáver en una fosa se debía exhumar los restos y trasladarlos a un nicho. Las dimensiones de este desaparecido panteón se redujeron cuando se prolongó la Avenida Díaz Mirón en épocas del Presidente Municipal Roberto Ávila. Este panteón   fue cerrado aproximadamente en 1986 y los restos mortales que en el había fueron trasladados al nuevo panteón llamado ahora Cementerio Municipal que hasta la fecha opera y que se encuentra junto a la colonia Dos Caminos sobre la Avenida de la Libertad. El Panteón Jardín que es de administración particular fue abierto en 1960  en el antiguo predio denominado "Positos" actualmente también sigue en funciones. También existen los panteones de Vargas y de Mata de Pita en el área rural del Municipio de Veracruz.
Tumbas del cementerio de San Juan de Ulúa.
 
Antiguo cementerio de la Ciudad. 
 
Panteón 20 de Noviembre.
 
Capilla   del Cementerio del Canelo.
 
 
Entrada original del Panteón Particular Veracruzano.