Opinión

La sencillez es la suprema sofisticación

Por Roberto Matosas


Una vez paseando por un bazar dijo:
  "¡Cuántas cosas de las que puedo prescindir!" John Sculley,  cuando aún estaba al frente de Apple, en una de sus conferencias dijo:  

"Todo lo que hemos aprendido en la era industrial se ha orientado a  crear más y más complicaciones. Pienso que ahora, cada vez más personas  están aprendiendo que es necesario simplificar, no complicar.  La sencillez es la máxima sofisticación". En mi blog también  recogíamos las palabras de Ángel Gabilondo: "Hay que saber mucho para  ser sencillo" (ver post La alegría es un desafío); o del propio William James: "Ser sabio es el arte de saber que hay que pasar por alto".


  Varias tendencias dominan el  mercado hoy día, y una de ellas es la de la Infoxicación, o lo que es lo  mismo, la intoxicación por exceso de información. De manera coloquial  podríamos decir que existe "mucho de todo", no sólo en información sino  en cualquier tipo de producto o servicio existen cientos de  alternativas.


  Esto, en principio parece mejor  para el consumidor, pero la experiencia demuestra lo contrario. La falta  de equilibrio, en este caso por exceso, no es buena. Ante tanta oferta,  nos saturamos, nos bloqueamos y evitamos decidir postergando la  decisión. Es la tesis en la que se basa el libro La paradoja de la elección: Por qué más es menos), del psicólogo Barry Schwartz y del que ya hemos hablado aquí en alguna otra ocasión.

  Un ejemplo: en una tienda de  gourmets se realizó el siguiente estudio. Se ofrecían descuentos por la  compra de mermeladas. En el caso que se ofrecía a los clientes probar  como máximo 6 mermeladas, el 30% de los clientes acabó comprando. Se  realizó la misma prueba pero dando a probar 24 tipos de mermeladas, y en  este caso sólo el 3% de las personas compraron.


  ¿Por qué ocurre esto?


  Barry Schwartz lo explica:  "Cuantas más alternativas damos a los usuarios, mayor es la percepción  que tienen de equivocarse lo que frena la decisión de compra" (ver post:  ¿El pragmatismo nos hace más felices?).


  ¿Qué hacer?


  En un contexto competitivo de  exceso alternativas e infoxicación, las empresas y personas que muestren  sus ofertas de manera sencilla, estructurada y ordenada, poniendo en  práctica la fórmula KISS (Keep it simple, stupid), tendrán una ventaja  competitiva de enorme valor. Algo ya hablamos de ello en el post El poder de lo simple, que hacía referencia al libro con el mismo título de Jack Trout, fundador de Trout and Partners


  Ayude a decidir y no a complicar  la vida a la gente. Lo dijo Andy Grove, Presidente de Intel: "Hay  muchos traficantes de confusión".