El próximo 21 de abril se cumple el primer centenario de la invasión norteamericana sobre el puerto de Veracruz, donde se dieron fuertes combates los días 21, 22 y 23 de abril de 1914, con gran cantidad de víctimas mortales.
Esta invasión duró hasta noviembre del mismo año, periodo en que la ciudad fue gobernada por autoridades norteamericanas.
Fue una invasión en toda la extensión de la palabra. Más de cuarenta buques de guerra y quizá 10,000 efectivos de las fuerzas armadas de ese país, -una de las cinco potencias militares más importantes del mundo en ese momento-, que se enfrentaron no sólo a militares mexicanos, sino también a cientos de civiles que aun sabiendo que no tenían posibilidades de derrotar al enemigo, -porque no tenían armamento competitivo frente a las armas modernas que traían los norteamericanos, ni preparación militar previa-, se confrontaron a militares profesionales sabiendo que estaban arriesgando su vida.
Sin embargo, en la historia de México está poco reconocido este acontecimiento.
Con el fin de obtener el reconocimiento nacional para estos héroes, en la ciudad de Veracruz se está dando un movimiento ciudadano que sólo tiene la finalidad de conmemorar el valor de los veracruzanos que defendieron su ciudad.
La Sociedad Cultural Baluarte, -conformada por ciudadanos-, así como la Cámara de la Industria de la Radio y Televisión, delegación Veracruz, (CIRT), y el Centro Cultural y Social Veracruzano, -ubicado en la Cd. De México-, unieron esfuerzos para realizar actividades que sensibilicen a la ciudadanía y generen el orgullo de pertenencia.
Conferencias, entrevistas en los medios de comunicación locales, distribución de material impreso relatando la historia de ese acontecimiento y spots de radio y televisión conforman hasta hoy las acciones principales de este grupo conformado por estas tres instituciones ciudadanas.
Se pretende lograr que el 21 de abril a las 12 horas del día todas las estaciones de radio locales y las televisoras tocan el himno nacional mientras la ciudadanía hace un minuto de silencio por los defensores caídos.
La invasión de Veracruz formó parte de un plan del gobierno norteamericano para desgastar al presidente Victoriano Huerta, -el usurpador que traicionó al presidente Madero siendo parte de su gabinete-, y el interés de los invasores de apoyar al gobernador Venustiano Carranza para que llegase al poder. De paso, el gobierno norteamericano pretendía cuidar los intereses de ese país en México, sumido en la lucha de intereses de la revolución mexicana, entre los cuales se encontraban las compañías petroleras.
Es de destacarse el papel de los ciudadanos que tomaron las armas. Pocos son los casos en que la ciudadanía se arma para combatir a un ejército profesional que le supera en número.
Esta es una oportunidad para destacar los valores ciudadanos y el patriotismo en una época en que se ha perdido el compromiso de los ciudadanos con el país.
