Opinión

Joyería artesanal: Amanda Canela

Por Ivonne Moreno


La variedad y riqueza en el campo del diseño tanto industrial como gráfico nos lleva a asomarnos al sorprendente mundo del arte.

En más de una ocasión hemos reiterado su conexión con los enlaces   de lo  utilitario o  lo aplicado para poder hacer uso del mismo y no tan solo contemplarlo.

Varios realizadores plásticos se abocan a esta práctica o ceden sus derechos de obra,  a  la serigrafía o impresiones en serie, para estamparlo en objetos  sobre todo  cuando   se trata de  venderlos en  las tiendas de los museos y poder de este modo  adquirirlos en : libretas, cerillos, imanes, tazas,  cajas, camisetas, mascadas y un sinnúmero de detalles para  poder tener un grato recuerdo de nuestras visita a exposiciones y espacios galerísticos.

Otros realizadores artísticos, trabajan la joyería,  en México, es ya una opción artesanal y Veracruz no es la excepción. Amanda Canela es uno de estos casos. Ella es ingeniero industrial y  tal como la esencia de la licenciatura lo indica, Amanda,  aplica su ingenio y creatividad  en uno de sus campos y este es el de la joyería artesanal.

En sintonía con la naturaleza y la minería Amanda aprovecha las propiedades de las piedras y las engarza en originales collares, pulseras y aretes en un trabajo exquisitamente femenino.

No excluyendo otras tendencias como las de la Kabbalah y adjagios del Viejo Testamento, cuyos principios nos lleva a involucrarnos con la alteridad y lo ético, Amanda plantea la salud, el bienestar, el amor, la abundancia y fertilidad, buena suerte y el equilibrio entre el cuerpo y el espíritu y sobre todo la paz interior como elementos fundamentales para ir ensartando en hilos, perlas, turquesas, amatistas, cuarzos rosas y blancos, granates la simbología de cada piedra y sus emanaciones  en relación con cada estado de ánimo de la persona quien usará el accesorio.

Sus diseños están registrados bajo el sello e intención de una creadora de la  Cuenca ( Amanda Canela es oriunda de Tlacotalpan) insistente en optimizar los encantos de la mujer.

No hay duda alguna de la conexión artística del diseño artesanal Concepto nacido en Veracruz en  el año 2009, y la vida pues su    objetivo central  es dignificar lo brindado por la Tierra en las manos transformadoras del ser humano, Amanda nos concatena con otro gran veracruzano,  Jorge Cuesta creador del poema Canto a un Dios  Mineral: 

Como si fuera un sueño pues sujeta

no escapa de la física que aprieta

en la roca la extraña

la penetra con sangres minerales

y  la entrega en la piel de los cristales

a  la luz, que la daña…

 

No hay solidez que a tal prisión no ceda

Aún la sombra más intima que veda

Un receloso seno

En vano pues al fuego no es inmune…

Pues con ello constatamos la imaginación  de los creadores y de lo oferente de la vida en un poema de piedras mimetizadas de anhelos.