Opinión

Violencia verbal

Por Alejandra Meza


La violencia verbal es mucho mas difícil de percibir porque no deja cicatrices físicas. Con frecuencia, la víctima es mujer y el perpetrador del abuso es varón, cuyo objetivo es hacer que la otra persona se sienta humillada, equivocada o mal, mientras que él se siente superior  y mejor.

 

Según los libros de textos especializados en el tema dicen que existen tres formas de ejercer este tipo de violencia: cosificar, degradar y amenazar.

 

•Amenazar: consiste en la forma más usual de ejercer la violencia verbal, prometiendo a la mujer ejercer violencia contra ella si intenta oponerse al hombre.
 

•Degradar: es un tipo de violencia que disminuye el valor de la persona por medio de frases como "eres una estúpida", "siempre te portas como una niña", etc. También se puede ejercer más sutilmente (sin que sea por ello menos doloroso) con frases como "no te preocupes si te sale mal la comida: ya sé que no lo puedes hacer mejor". Este tipo de violencia verbal es muy doloroso para la mujer, porque no es muy visible pero la afecta emocionalmente y de manera muy profunda.
 

•Cosificar: consiste en hacer sentir como un objeto sin valor a la persona, poniéndole sobrenombres o dirigiéndose a ella de manera despectiva; por ejemplo: "Tonel, ven aquí" etc.
 

VIOLENCIA VERBAL Y DISCRIMINACION FEMENINA
Escuchar un piropo en las calles,  miradas a tu cuerpo que te hacen sentir incómoda o comentarios que minimizan las capacidades de las mujeres son sólo algunos ejemplos de discriminación femenina, sin embargo, ocurren con tanta frecuencia que  pasan desapercibidas.
 

"Nos hemos acostumbrado a la violencia porque es algo que pasa todos los días y las mujeres han aprendido que es algo que deben soportar en todos los ámbitos. Sin embargo no es así, deben saber que nunca deben ser humilladas  o acosadas.
 

Los centros de trabajo son el lugar donde más frecuentemente las mujeres sufren discriminación: de los más de 10 millones de mujeres que trabajan en México, el 30% de ha padecido algún tipo de violencia laboral, según datos de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH).
 

A continuación te presentamos ejemplos de discriminación laboral y consejos sobre cómo reaccionar en cada caso.
 

VIOLENCIA VERBAL
Este tipo de violencia incluye insultos, gritos  y amenazas y es una de las formas de discriminación más comunes en las empresas.
 

Las víctimas más frecuentes son mujeres con estudios posteriores a la secundaria,  desde carreras técnicas hasta doctorados. Este tipo de violencia es más común en empresas privadas, bancos y comercios.
En dichos lugares se presentan casi la mitad de todos los casos a nivel nacional, según la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares 2006 (ENDIREH).
 

"Este tipo de violencia pasa frecuentemente en corporativos muy grandes donde hay mujeres que tienen puestos importantes y que no pueden denunciar nada, porque al hacerlo se clasificarían como víctimas y más bien su trabajo requiere que se vean como líderes y como personas fuertes y capaces".
 

Cómo responder
Aunque puede ser difícil, intenta mantener la calma y no adoptes una postura defensiva.  La mejor opción es que des una respuesta clara y propongas soluciones al problema; sé firme, aclara que no estás de acuerdo con ese trato y aléjate antes de seguir recibiendo insultos o gritos.
 

Si la situación se repite, lo mejor es que platiques con tu jefe en un momento de tranquilidad para saber cuál es el motivo.
 

La discriminación femenina mediante el acoso se manifiesta a través de propuestas indecorosas, miradas lascivas, acariciar o tocar a una persona sin su consentimiento.
 

Este tipo de agresión lidera la lista de violencia más común contra las mujeres mexicanas.
Unas 205,587 mujeres aseguran haber recibido propuestas indecorosas en su lugar de trabajo; 102, 391 dice haber sido "acariciada" sin su consentimiento; 125, 366 tuvo represalias por no acceder a propuestas, y 10,346 de ellas fueron obligadas a tener relaciones sexual
 

ACOSO SEXUAL.
 

Cómo responder
Por lo general, los hombres que acosan a las mujeres se complacen al ver que ellas se sienten incómodas y nerviosas, pues les da más poder y control sobre ellas, así que no sigas el juego.
 

Si alguien te dice frases como: "qué bonitas piernas" u  "hoy vienes muy escotada, seguro es para provocarme", ignóralo, ni siquiera sonrías. Esto mostrará que no estás de acuerdo con estas actitudes y ayudará a detener este tipo de violencia.
 

Si las insinuaciones persisten, lo mejor es que recurras con alguna autoridad o con el área de recursos humanos.
Otra forma de prevenir este tipo de actividades es fijar tu postura sobre la forma en que conduces tus relaciones en el trabajo. Si alguien te invita a salir y no estás cómoda con ello,  no lo aceptes sólo para quedar bien; sé clara desde el principio y hazles saber que no te gustaría salir, pues podría alterar su relación laboral.
 

"A las propuestas de trabajo que resulten incómodas se les debe poner un límite desde el principio, sin tener miedo de lo que pueda pasar, porque al final del día lo que te estás jugando es tu integridad. Si la conducta persiste después de esta advertencia, es importante consultar a alguien de Recursos Humanos o comentarlo con alguna autoridad",


VIOLENCIA PSICOLOGICA
La mayoría de los agresiones en el trabajo por suelen hacerse por personas con grados mayores de jerarquía o poder sobre otros.
 

En México, la  mayoría de la violencia y discriminación a las mujeres se da por parte de un jefe: 820,772 casos se realizan por superiores y 398,655 por compañeros.
 

La forma más común de ser víctima de violencia psicológica es recibir instrucciones equivocadas a propósito o ser ignorada en el trabajo, lo que incluye estar siendo obstaculizada en la realización de tus labores.
Cómo responder
 

Si tus compañeros son los responsables, lo mejor es que busques a una persona externa a ese ambiente (ya sea de Recursos Humanos o algún superior), para que puede mejorar estas relaciones y recordar a los otros que  eres parte del equipo.
 

"Actualmente hay mucha competencia en las empresas y hay gente a la que no le importa pisar al otro y hacer lo posible para que le vaya mal en su trabajo, para obtener puestos o hacerse notar como el poderoso o el líder".